Desde hace mucho tiempo he defendido públicamente la necesidad de esta nueva Facultad. Es por ello que estoy muy satisfecho con el resultado. Aunque ahora se abre un período complejo estoy convencido que conseguiremos aunar esfuerzos, acercar visiones e ir edificando una nueva cultura institucional.
Mi satisfacción no es la misma con el proceso que nos ha llevado hasta aquí. Creo que se ha desaprovechado una oportunidad para convertir el proceso hacia la nueva Facultad en un momento para conocernos mejor y construir la nueva realidad de manera participativa. El camino no lo ha compartido el conjunto de miembros de las dos Facultades. Por ello decía que ahora se abre una etapa que no será fácil de gestionar y donde el principal reto debería ser recuperar la participación. Una etapa compleja pero apasionante.
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